Conjunción Júpiter y Urano: la consciencia y energía necesitan alinearse con la materia

Estos planetas de unen cada 13 o 14 años, pero no lo hacen en Tauro desde 1941. Esta conjunción siempre trae grandes acontecimientos, anuncios disruptivos, cambios abruptos, movimientos muy poderosos y francamente revolucionarios que pasan a la historia como grandes hitos. Rompen y liberan cadenas.

Urano es el rayo frecuencial que fulmina lo cotidiano, lo estable, lo conocido, lo seguro (todo lo que simboliza Tauro). Es impredecible lo que mueve a nivel de la realidad, porque lo que se precipita es algo que aún no tiene forma en nuestra mente, ya que concita todo lo inédito y el potencial inexplorado.

Es un movimiento tan potente que su ingreso en Tauro lo venimos sintiendo desde 2018. Pero para darle mayor contundencia y dramatismo al caso, ahora se une a Júpiter que es el planeta de la Expansión. Toooodo ello, en tiempos de Plutón en Acuario que impulsa grandes cambios aventándonos a terreno desconocido. Y como si fuera poco contexto, hay algo más… que esta conjunción se dé con posterioridad a los eclipses en el eje Aires-Libra, hace que esto sea absolutamente un evento MUY potente.

Se da en Tauro. Tauro simboliza la estabilidad, la pausa, la constancia, la seguridad, el aplomo, el anclaje… y en general nos provee de esa energía para nuestro ciclo anual. Pero dejanos decirte que con estos movimientos cósmicos lo que menos se sentirá es estabilidad, pausa, seguridad, aplomo o anclaje. Porque estamos generando nuestra nueva forma de estabilidad, y es etérea, no es material, no es concreta. Para percibirla, tenés que activar tu percepción extrasensorial. Hay nuevos conceptos de valor y nuevas formas de seguridad que se escriben en un terreno sutil, pero la energía taurina en nosotros necesita de lo concreto para no enfurecer/desesperar. Tengamos esto en mente, para poder encausarnos rápidamente en los momentos de desespero. Hay una realidad que se escribe más allá de lo que podemos captar con la inmediatez de los sentidos. El aire que respiramos, por ejemplo. Existe y es vital para nosotros, aunque no seamos capaces de percibirlo si está en calma.

Como decíamos antes, son cuestiones que se empezaron a sentir desde 2018 y ahora empieza a aparecer el Sentido de toda esa transformación. ¿O acaso antes de 2018 tu vida no se proyectaba de manera lineal y más o menos estable, pero desde entonces en adelante empezamos a transitar por una especie de ripio tedioso que parece nunca acabar?

Esta conjunción entre Urano y Júpiter en Tauro trae Apertura, Oportunidad y Chispa. Cuando hay roces entre nosotros y la realidad, hay chispa. ¡Encendamos e Iluminemos lo que no estamos viendo! ¡Utilicemos el recurso que el universo pone en juego! Y aunque de alguna forma seguramente te pasa de entender las áreas de nuestra vida (y de vos mismo/a) que vienen teniendo una profunda transformación, este movimiento promete generar grandes sorpresas.

Nos va a quedar muy claro que ya no necesitamos más viejas formas de vivir. Lo decimos, lo sentimos, pero a veces nos hacemos trampa. Hay que renunciar a las cuestiones que nos estancan para apuntar al Crecimiento. Eso se lleva a cabo, reorganizando nuestras prioridades y soltando sin culpa todo ese lastre narrativo que no nos deja elevarnos. Vas a salir de tu (ya poco cómoda) “zona de confort”, por eso lo único que se requiere de nosotros es Apertura de mente, Apertura de Corazón y estar Dispuestos a obrar en coherencia.

Urano es el rayo despertador cósmico que sacude la tierra y rompe la rutina. Propicia cambio, revolución y despertar de consciencia. Es disruptivo porque llegó el momento de conectar con nuevas Frecuencias.

Por su parte, Júpiter expande y beneficia el cambio hacia lo inédito. Es el guía espiritual, es el que nutre la confianza, el anhelo de prosperidad, el optimismo, el entusiasmo por la libertad y la necesidad de ser auténticos.

Pulsa sobre nosotros un momento de una Renovación completa. Pero ojo al piojo… no hay que confundir lo que sucede a nivel energético, con lo que percibiremos a través de nuestros sentidos, no romanticemos el proceso ni tampoco alojemos expectativas inmaduras. Es un movimiento fuerte que propicia mucha incomodidad para el yo social.

Júpiter amplifica lo que toca. Te va a tocar, ¿qué hay en vos? Saturno en Piscis hace rato largo que nos viene invitando a conectar con las dimensiones sutiles de nuestra Alma y su Raíz profunda a nivel cosmogónico. Nos pide madurez, responsabilidad y disciplina para la construcción de ese gran sueño que tuvimos al elegir hacer nuestra experiencia en el planeta. Si venís haciendo el trabajo, se te amplificarán las recompensas. Pero si venís haciéndote trampa Júpiter te va a amplificar el caos.

Nuestro refinamiento, es nuestra responsabilidad evolutiva como especie. Nadie cosecha lo que no siembra. Eso es libre albedrío. Júpiter no deja dudas sobre quién es quién.

Este cielo nos religa con nuestra maravillosa capacidad Creadora. La Capacidad de bajar a Tierra los recursos que nos son entregados en el plano de las ideas. Es que nos somos capaces de pensar algo diferente a lo aprendido. Cuando recibimos inspiración de los planos superiores de Consciencia, lo que se evalúa, es la capacidad del individuo para Plasmar. Somos instrumento de cambio si nuestra gestión interior nos lo permite. Eso es traer el cielo a la tierra.

Experimentaremos muchos cambios en relación con la materia. La materia está vibrando más. Por eso hay cambios en la percepción del tiempo, por eso hay muchas personas en un estado de alteración que no comprenden. Cambia el vínculo que tenemos con el cuerpo físico que nos es dado para recorrer esta realidad dimensional, con la conexión con la Naturaleza, con la forma de percibirnos. Por ende, cambia también la forma de darnos estabilidad y seguridad. Sí, todo eso en medio de un mundo muy convulso. El desafío es ese. Ese es el juego y elegiste jugarlo.

Esta alineación abre un potencial muy grande. Es una actividad sísmica fuerte (frecuencial y real en lo terrenal) que activa miedos, resistencias y guerras de poder. Lo más conveniente a nivel personal es desde la Sagrada Presencia permitirnos la Apertura de no consentir que las circunstancias nos definan. Habitar lo energético con responsabilidad. Si conocemos genuinamente el Amor (que no es el falso amor que nos solemos profesar entre humanos), irradiarlo lo máximo que nos sea posible. Si no lo conocemos (no te preocupes, no has sido entrenado en esta frecuencia y la mayor parte de la población desconoce esta onda de resonancia) alcanza y sobra con que te Sostengas en Armonía interior, alcanza con habitar el Silencio, con no juzgar, con equilibrar las cargas interiores. No tenés que salvar a nadie. No tenés que ayudar a nadie. Ayudate vos. Se vos un lugar seguro.

Este cambio de frecuencia lo que SÍ necesita de vos es un cambio de Consciencia. La materia tiene una vibración mayor. Nosotros somos tres núcleos: Materia, Consciencia y Energía. En este momento, la Consciencia y la Energía necesitan alinearse con la materia para aliviarnos de malestares físicos (dolores de cabeza, pesadez, dolores articulares, enfermedades, etc).

¿Cómo elevo la Consciencia? Tomar cursos, coleccionar libros, saber mucho de espiritualidad, no va a elevar tu Consciencia. Saber no te da Consciencia. La Consciencia se va a Elevar en la medida en que se alinee con la nueva Frecuencia que se está descargando en el planeta. La Consciencia se concita mediante la Autoobservación y la Reflexión del sí mismo. El Conocimiento puede servirte de guía, pero te aseguro que hay gente que tiene una vida sencilla, sin saberes sofisticados, con muchas menos distracciones de las que proponen las grandes urbes, que tienen un Alto Grado de Consciencia.

La Consciencia se mide por el grado de Respeto que la persona tiene. Hacia ella misma, y hacia el contexto. La Consciencia se manifiesta en el Amor. Y no se puede hablar de Amor si no hay Respeto. La Consciencia viene del Espíritu, y el Espíritu es Energía en Movimiento (“Por sus frutos los conocereis”). En Movimiento. No es por lo creas, no es por lo que leas, no es por lo que sepas… es a través de tus obras que te narras a vos mismo/a y te escribís la historia en la que viaja tu Consciencia.

¿Quién sos a la hora de responder cuando el afuera te convoca?
¿Quién sos a la hora de cuestionar?
¿Quién sos a la hora de Amar?