La actividad fisca ¿solamente da beneficios estéticos?

Con el inicio de la primavera comenzamos a escuchar las típicas frases "no llego al verano", "ya es tarde, yo quiero ser feliz", "no me entra la ropa de verano" y da inicio a la temporada de arranco el lunes con todo el ejercicio físico y la actividad física con los objetivos de obtener un mejor aspecto. Ahora ¿la actividad física solo proporciona un buen aspecto físico? ¿Tan solo eso y nada más? si a la hora de tomar la decisión de dar inicio con la actividad solo pensamos en esto, estaremos viendo únicamente la punta del iceberg de todo lo que proporciona, estaremos perdiendo la visión de todo lo que está bajo el mar y toda esta información tiene una importante repercusión en nuestra salud física, social y mental.

En la visualización total del iceberg se manifiestan múltiples procesos en nuestro organismo a la hora de dar inicio con la actividad física, nuestro cuerpo comienza a experimentar el aumento de la demanda de oxígeno, nutrientes y la eliminación de desechos, lo que provoca que la fisiología de nuestro organismo se adapte a la nueva disposición requerida. Pero en esencia ¿produce solo eso? y la verdad es que en esencia se produce esto con nuestra fisiología, pero esta simpleza de nuestro organismo que va de la mano de múltiples procesos complejos, nos pueden permitir escalar hasta las más altas montañas, nadar distancia inimaginables, practicar deportes del más alto nivel de exigencia física y mental, nos va a facilitar imaginar, comprender y disfrutar desde los lienzos más extraordinario hasta las fórmulas más complejas de la ciencias o tan solo disfrutar de los simples momentos con amigos y familiares. Todo esto es debido a todos esos procesos que se manifiestan, los cuales generan beneficios en nuestro organismo a tal punto que no solamente va desde lo físico sino que repercute tanto en lo social como el estado mental cognitivo de las personas.

Cuáles son estos beneficios que se manifiestan desde un enfoque físico, mejora el funcionamiento del sistema cardiovascular, respiratorio, digestivo y endocrino, fortaleciendo el sistema osteomuscular, aumentando la flexibilidad, la disminución de niveles séricos de colesterol y triglicéridos, intolerancia a la glucosa, obesidad y adiposidad. A nivel psicológico, permite la tolerancia al estrés, adopción de hábitos protectores de la salud, mejora del auto concepto y la autoestima, disminuye el riesgo percibido de enfermar, generando efectos tranquilizantes y antidepresivos, mejorando los reflejos y la coordinación, aumento en la sensación de bienestar, prevención del insomnio, regulación de los ciclos de sueño y mejoras en los procesos de socialización. 

Es increíble lo anteriormente mencionado y es tan solo una parte del iceberg, la realización continua en el tiempo de actividad física tiene una gran repercusión en la prevención o mejor dicho en la reducción de posibilidades de aparición de múltiples patologías relacionadas con el bajo nivel de actividad física ya sea cardiopatías  isquémicas, hipertensión arterial, enfermedades cerebrovasculares, diabetes tipo 2, obesidad,  osteoporosis, disminución musculo esquelética, desórdenes mentales o emocionales y el listado continua con diversas patologías que pueden generar grandes cambios en la vida del individuo como familiar. Por eso siempre digo las mejores enfermedades para tratar son aquellas que no se forman y las posibilidades se reducen con la inversión de tiempo en una actividad física que nos guste.

Ahora remarco no tiene nada de malo ni es cuestionable el pensar hacer actividad física para obtener un mejor aspecto físico, pero hay que saber que al realizar nos abre al mundo de los beneficios del iceberg, los cuales van a mejorar muchos aspectos de nuestra vida, haciéndola más saludables.

¡Disfruta y vive con los beneficios del iceberg!

Emanuel Lucero, Licenciado en Kinesiología – MP P-09690

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