"La Hora del Planeta": apagón mundial contra el cambio climático

La Hora del Planeta invita a la población, organizaciones, empresas y gobiernos a que apaguen las luces de sus casas, oficinas, edificios, construcciones y monumentos durante una hora. Sumado al apagón, la Hora del Planeta, organizada por El Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), propone diferentes actividades en distintos países, y también habrá algunas iniciativas regionales. La hora elegida es las 20.30 (hora local de cada país).

Qué es: es un llamado a apagón mundial que busca concientizar sobre la crisis climática y promover acciones en pos del cuidado del planeta.

Cuándo es: el sábado 27 de marzo, de 20.30 a 21.30 (hora local de cada país)

Cómo puedo participar: donde estés, apagá la luz y otros aparatos electrónicos durante una hora. También podés hacer activismo en redes sociales antes y después de esa hora, y sumarte a la marcha virtual.

¿Cómo surgió La Hora del Planeta?

Corría el año 2007 cuando la oficina de WWF de Sidney decidió organizar un apagón de las luces de la ciudad y de los edificios más emblemáticos . El año de su surgimiento, esa primera Hora del Planeta convocó a dos millones de personas, y al año siguiente se convirtió en un movimiento mundial, siendo la campaña de WWF que más personas ha movilizado en la historia a nivel global por una misma causa.

En 2019, cientos de millones de personas de más de 188 países de todos los continentes, en más de 7000 ciudades, apagaron sus luces, llegando así a la edición récord de esta movida.

Susan Díaz, directora de Comunicaciones de WWF Chile, fue la organizadora de la primera campaña chilena en el 2009. “El apagón en Sídney tenía un concepto claro, atractivo y llamativo. Esto permitió que la misma iniciativa pudiera replicarse en otros países”. Al tener tanto éxito, al año siguiente otros países se fueron sumando. “En el caso de Chile, año tras año hemos ido viendo cómo La Hora del Planeta se convierte en una efeméride dentro de la agenda nacional, a la altura de días tan emblemáticos como el Día del Agua, por ejemplo”, comenta Díaz.

El apagado de luz es el principal símbolo que permanece año tras año. Sin embargo, el logo que era representado por un “60”, por los minutos que dura La Hora del Planeta, unos años más tarde incorporó un signo más, “60+”, porque según Diaz, se buscó que las transformaciones no solo se realicen durante una hora, si no que sean permanentes durante el resto del año.

Para WWF, La Hora del Planeta es el día más importante del año. “Es una actividad muy especial que esperamos con muchas ganas”, dice Díaz. “Es enriquecedor ver cómo la gente se acerca, nos consulta por cómo sumarse, nos renueva la energía ver cómo la gente se interesa y está deseando participar”, suma.

La Hora del Planeta latinoamericana

Colombia fue el primer país latinoamericano en sumarse, en 2008. Al año siguiente se apuntaron Chile, Argentina, Perú, Brasil y México. Este año, al igual que los últimos cuatro, además de las propuestas nacionales que varían de país en país, habrá una Hora del Planeta Latinoamericana. La propuesta es una marcha virtual de 14 días de duración a través de una página web, donde cada participante puede diseñar un avatar, elegir entre varias consignas de reclamo ambiental y compartir la ruta con otros miles de latinoamericanos de forma online. La marcha culminará en una concentración virtual el 27 de marzo a las 20.30 (horario de cada país), evento en el que se mostrará un video sobre el estado de la Tierra.

Las tres temáticas que América Latina ha elegido para este año son: biodiversidad, cambio climático y contaminación plástica. “El tema de biodiversidad es muy importante para la región porque en el último informe de WWF reveló que más del 60% —y en América Latina cerca del 90%— de la población de animales y plantas están disminuyendo”, afirma Díaz.

“Es necesario que quienes vivimos en Latinoamérica revisemos nuestra relación con la naturaleza y estemos más alertas sobre lo que está pasando en nuestros ecosistemas”, agrega.

Los plásticos son una problemática a nivel mundial y en América Latina también están haciendo estragos, avisan desde WWF. Este año también se levantará la bandera del cambio climático, que es el paraguas bajo el que surgió la iniciativa.

“Hace una década, antes de que surgiera La Hora del Planeta, la gente no sabía que el cambio climático les afectaba. Pensaba que solo ocurría en los polos o a los osos polares. Sin embargo, cada vez somos más conscientes de que los efectos del cambio climático nos afectan a nosotros como comunidad”, suma Díaz.

Una iniciativa más allá de las siglas

La Hora del Planeta superó a la organización que lo promovió. Por ejemplo, en América Latina, WWF tiene presencia en casi todos los países a excepción del Caribe. “En muchos casos donde no hay oficinas de WWF,  normalmente hay organizaciones ambientales que promueven La Hora del Planeta, WWF les apoya e invita a las reuniones. Siempre hemos buscado aliados más allá de las siglas o de la presencia institucional en un determinado país”, dice Díaz.

La idea del evento es sumar la mayor cantidad posible de personas. “Nos ha pasado que hay colectivos y grupos que promueven la Hora del Planeta sin necesidad de haber entrado en contacto con nosotros”, continúa.

“Me gustaría pensar que la Hora del Planeta ha sido un actor principal para que la gente haya ido teniendo más conciencia, pero no tengo la certeza”, expresa. Sin embargo, de lo que Diaz está segura es de que año tras año los números de participación han ido creciendo. “Ya son billones de personas las que participan, ya sea por redes sociales u otras opciones”. Junto a la participación en el apagón, a WWF le gustaría pensar que la adhesión a La Hora del Planeta genera un cambio de conciencia y se traduce en acciones.

“Necesitamos quebrar la curva de ecosistemas y poblaciones vivos porque este es el año y la década para recuperar la salud del planeta para el futuro”, cierra.