Villa de Merlo: ¿Qué pasará con los nodos de seguridad?
En su reciente visita a Villa de Merlo, la Ministra de Seguridad, Nancy Sosa, abordó la problemática de los nodos de seguridad adquiridos por la gestión anterior. Aunque el plan de la antigua administración era ubicarlos en distintos puntos estratégicos de la ciudad para reforzar la seguridad y prevenir delitos y había enviado más de una decena de ellos a la localidad, solo tres fueron instalados: en los barrios 272 Viviendas, Cerro de Oro y Piedra Blanca.
El resto, al día de hoy, puede observarse en el predio de la Comisaría 42°. A la intemperie y uno al lado del otro, estos siete dispositivos no cumplen ninguna de las funciones para las que, se decía, fueron comprados.
El Gobernador Claudio Poggi había afirmado días después de asumir su mandato que la adquisición de los nodos se realizó con fines lucrativos, desviando fondos públicos y que no se los instaló en su totalidad. “¿Vieron esas garitas de chapa que han distribuido en las principales ciudades? Se compraron a principios de año (2023), lo hizo el ministro (Luciano) Anastasi, 300 nodos. Presupuesto de ese momento, 1.200 millones de pesos, los 300 nodos. No se compraron para la política de seguridad, se compraron para hacer negocio con plata del Estado”, denunció el primer mandatario puntano en aquel entonces.
La ministra de Seguridad reveló, además que estas “garitas” están judicializadas debido a esas irregularidades, con aproximadamente 70 unidades faltantes y un pedido de devolución de dinero en curso.
Consultada por ECN por si se planea ponerlas en funcionamiento, al menos las que faltan colocar en Merlo, expresó que se está evaluando su refuncionalización. “Entendemos que no podemos tener un efectivo fijo dentro de un 1x1 cuando el delito está en movimiento. La Policía de la Provincia tiene que estar en movimiento. Entonces, hay que buscar la forma de refuncionalizar”, dijo.
En ese sentido, la funcionaria provincial manifestó que se buscará implementar un plan que incorpore tecnología, contemplado en el presupuesto del próximo año, para otorgarle un nuevo propósito a estos nodos.
“Pero, de ninguna manera, el enfoque que se tenía de la seguridad nos parece que era el correcto. Porque poner al policía dentro de ese lugar es limitar su acción. Tenía que estar cuidando ese nodo y no atento a la prevención y a poder moverse en torno a donde se mueve el delito. Es una decisión muy básica, por no decir malintencionada”, criticó Sosa.
